Pedro Añíbarro Sanz «GUINDI»

«LA SONRISA DEL VRAC»

Nunca deja de sonreír, forma parte de su personalidad. Los que han visto crecer a Pedro con un oval bajo el brazo aseguran que siempre estaba feliz. Y ahí sigue, riendo y sonriendo. «Guindi» está muy orgulloso de su apodo que recibió con apenas seis años siendo «jabato». La enorme velocidad cada vez que recibía el balón y su manera de galopar hacia la zona de marca conferían un carácter especial a su juego. Pedro siempre ha sido como una guindilla picante que hace que entres en calor inmediatamente. Dentro y fuera del terreno de juego.

Simpático, extrovertido y jovial, es un compañero ideal para cualquier grupo porque aporta mucha positividad. Es uno de los jóvenes de la quinta 2002 que tantos éxitos lograron para la cantera del VRAC.

Guindi adora el rugby y es «Quesero hasta la médula», uno de sus sueños desde chiquitito era debutar en División de Honor con el primer equipo. Ya ha llegado y debe seguir trabajando duro para demostrar a sus técnicos que pueden contar con su presencia en el campo. La temporada pasada no fue nada fácil para él, tuvo unos problemas de salud que le obligaron a cortar el trabajo con el equipo y esperar a ver si en la 23/24 vuelve a ser esa «guindilla» pequeña y picante que acelera el pulso de los aficionados.

Estudiante de Administración y Dirección de Empresa