El VRAC Sub 23 batalló hasta la última jugada por no marchar de vacío del derbi de Pepe Rojo frente a El Salvador. Los chamizos ganaron (0-12) con justicia visto lo visto sobre el césped, pero el Entrepinares complicó la propuesta de los blanquinegros y aspiró a todo durante prácticamente todo el encuentro.
Comenzó el duelo con igualdad y con un VRAC valiente que estaba dispuesto a ponerle las cosas difíciles al Chami. Los azulones parecían tener un imán en touch, acierto que evitó que varias acciones de los vecinos acabaran en ensayo. El pulso se mantuvo al 100% hasta el minuto 30, cuando llegó el primer ensayo, transformado, de El Salvador. Con ese 0-7 se llegó a un agradecido descanso para recargar energías.
La reanudación dejó un guion similar al del tramo final del primer acto, con los chamizos teniendo la iniciativa y el VRAC insistiendo en la fortaleza defensiva para retener el bonus defensivo y aspirar a un susto final. Sin embargo, las lesiones, la inferioridad numérica y el desgaste general pasaron factura y la sentencia llegó en el minuto 67. La última jugada pudo dejar los primeros puntos para los queseros, pero el pitido final confirmó el 0-12 a favor de El Salvador.
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