Las chicas del VRAC no le temieron a nada y salieron al encuentro sin complejos y dominando gracias a que en el equipo se juntó la juventud de algunas de las integrantes y la experiencia de los refuerzos. La primera parte fue de mucho juego y entretenimiento por parte de ambos equipos. Pese a que el marcador se abrió rápido con dos ensayos por parte de las pingüinas, las azulonas respondieron con otro ensayo. Durante toda la primera mitad se vio como el juego se convirtió en un intercambio de golpes en forma de ensayos, si un equipo anotaba, el otro respondía, esto permitió a los espectadores ver un partido divertido que al descanso se saldó con un resultado de 19-12 favorable a las locales.

La segunda mitad fue en la tónica de los primeros cuarenta minutos, con ambos equipos dominando e intercambiando ensayos. A falta de 10 minutos para el final las queseras atacaron sin parar la línea de 22 de las burgalesas sin mucho éxito. Pese al que el marcador definitivo marcó un 27-17 favorable a las Pingüinas, el partido sirvió de aprendizaje para las queseras. El enfrentamiento además dio cabida a que ambos entrenadores introdujeran en el encuentro nuevas pruebas tácticas y a jugadoras nuevas, destacando a Quen Makking nuevo flamante fichaje de las burgalesas.