El filial quesero afrontaba en Santander su estreno en 2020 con Bathco Rugby Club como rival. Lo hizo con una alineación inédita en la primera vuelta, debido a las circunstancias académicas, pero manteniendo las ganas y la buena actitud con la que se afrontó el final del año anterior.
La buena actitud se plasmó en el marcador, ya que se cosecharon diversas marcas en los primeros instantes del encuentro. Los errores de disciplina lastraron al VRAC, lo que propició que el equipo verdinegro transformara dos castigos, las únicas anotaciones del equipo local.
El ritmo de puntos fue constante a lo largo de toda la primera parte por la intensidad y el buen hacer azulón. Tras el receso se dieron minutos de calidad a hombres menos habituales manteniendo el nivel de juego y posesión, a pesar de no poder reflejarlo en el electrónico, sólo fueron dos marcas transformadas en la segunda parte. Semana interesante para preparar un encuentro importante contra el primer clasificado, la UE Santboiana.