«Si me dicen al principio de la semana que vamos a quedar as�, firmo ahora mismo», fue uno de los comentarios que pude escuchar u otro del tenor de «siempre los mismos, exigiendo demasiado y criticando todo». La respuesta es sencilla: los objetivos se marcan en funci�n de la calidad y hasta ahora, exceptuando el partido de La Vila, no he visto mejor plantilla y m�s completa que la del VRAC. Con este mensaje lo que quiero transmitir es que hay un margen muy amplio de mejora y que somos mucho m�s equipo de lo que demostramos las dos �ltimas semanas.
Esto no es una cr�tica sino todo lo contrario. Es un elogio hacia las cualidades de todos y cada uno de los que forman parte de un grupo, respaldado y apoyado al m�ximo, que puede y debe jugar mejor al rugby. Intensidad, car�cter, responsabilidad y compromiso pueden modificar un resultado cuando predomina la igualdad.
El domingo debimos marcar cuatro ensayos y lograr cinco puntos y casi perdemos el partido. Faltaban varios titulares, algunos de ellos importantes, pero no creo que sea lo m�s adecuado trasladar la presi�n de una ausencia al sustituto. Eso s� que suena a excusa porque la realidad es a veces muy diferente.
No hay que ejercitar demasiado la memoria para recordar el final de la temporada pasada donde pudimos asistir a uno de los mejores «quesos» de los �ltimos a�os que ya es historia del VRAC. Lo que pido desde estas l�neas es que, entre todos, sigamos haciendo historia disfrutando en la segunda vuelta de un equipo «casi perfecto», disputando el t�tulo de liga hasta la �ltima jornada y olvid�ndonos de la yenka.