Por la puerta grande pero con un sabor agridulce. Le hubiese gustado despedirse sobre el césped, donde ha brillado y aportado como el que más durante las últimas temporadas. Una inofortuna lesión le cortó la progresión en plena temporada y cuando demostraba el gran nivel al que nos ha tenido acostumbrados. Ignacio Gutiérrez Müller, Nacho Müller, dice adiós al VRAC. O hasta luego, que nunca se sabe. Las puertas de su casa siempre estarán abiertas. El hispano-argentino nos deja estas palabras de despedida:

GRACIAS DE VERDAD

Siempre es duro, pero ha llegado el momento de decir adiós. Emprender nuevos proyectos personales son los que me sitúan lejos del VRAC, de Valladolid y de Pepe Rojo. Muchos seguramente lo sabían y era algo que venía meditando desde hace tiempo.

Se me hace verdaderamente difícil despedirme después de haber vivido tanto en esta maravillosa ciudad. Esta es mi casa y es así como siento al VRAC. Es aquí donde he terminado mis estudios, he crecido como persona y me he desarrollado como jugador. Sin duda grandes años que jamás olvidaré.

Parece que fue ayer cuando llegué al club, ya hace unos cuantos años de esto, y puedo asegurarles que han sido de los mejores de mi vida. Grandes amistades y maravillosos momentos de Rugby que me llevo para toda la vida.

Deportivamente, qué les voy a contar…se ha sufrido mucho y se han ganado más, fruto del trabajo y sacrificio de todos…Sin duda mi balance es totalmente positivo y me voy feliz de que hayamos logrado cosas que se recordarán a través de los años.

Cómo no, agradecer a aquellas personas y amigos que confiaron desde un primer momento en mí para venir al club, de formar parte de él y de vivir con esta gran familia, el VRAC. Aquí están mis amigos, mis hermanos, con los que he compartido tantas batallas, viajes, llantos y alegrías; vivencias inolvidables que nunca se borrarán del recuerdo. Sin ellos esto no hubiera sido lo mismo.

No me puedo olvidar de esta gran afición quesera que siempre está: haga frío, viento, perdamos o ganemos; a la cantera de niños y a todos los entrenadores, directivos…en definitiva a todos vosotros que hacéis que esto sea una familia. Creo que no hay palabras suficientes para agradecer a este Club todo lo que me ha dado.

Me siento honrado y orgulloso de haber podido defender estos colores.

Gracias familia, gracias VRAC.

NACHO G. MÜLLER

 

Gracias a ti, amigo