Sus cinco estrellas (sólo cuentan con ellas tres hoteles en toda la provincia) se consiguieron por varios motivos, pero sobre todo por la singularidad de su edificio, la comodidad de sus instalaciones "perfectas"; amplias, acogedoras y tremendamente equipadas, la belleza del paraje y el jardín que lo rodea y la calidad excelsa de su servicio.
Pauta, esta última, innegociable para los cincuenta empleados del hotel AC Palacio de Santa Ana que sostienen un compromiso acérrimo con el servicio que prestan para dar el mejor alojamiento en sus 98 habitaciones y que las convenciones, las bodas o los diferentes banquetes que suelen acoger se conviertan en inolvidables momentos.
"Acogemos el alojamiento de la mayoría de los eventos importantes que se celebran en Valladolid. Este hotel era un monasterio del Siglo XVIII que se ha reconstruido tal cual marcaban los planos originales. El claustro con cúpula de cristal se puede utilizar durante todo el año y es el corazón del hotel", detalla Luis Martínez-Iñiguez.
Cuenta con diez salas de reuniones y está capacitado para acoger banquetes de quinientas personas y convenciones de unas quinientas, lo que habla con elocuencia de la vasta capacidad de las instalaciones del hotel AC Santa Ana, que posee 98 habitaciones estándar, cuatro suites y una presidencial en la que se han llegado a alojar el director Woody Allen o los cantantes Jennifer López con su marido Marc Anthony o Julio Iglesias, entre otras personalidades de relumbrón.
No en vano, el hotel AC Palacio de Santa Ana no ha podido regatear la crisis. Casi nadie lo ha hecho y a pesar de que no le ha afectado tanto como a otros integrantes del sector, el hecho es que también le ha golpeado. "El sector se está viendo bastante afectado. La facturación ha sufrido bajadas muy importantes, gravísimas y, como en otros sectores, la crisis nos da de pleno. Los hoteles urbanos están sufriendo mucho. En nuestro caso, la celebración de bodas es una tercera pata que nos permite aguantar mejor, pero el nivel de bodas registradas ha descendido y también se nota", esgrime Martínez-Iñiguez.
En este sentido, receta la fórmula para capear el temporal. "Ser imaginativo, apartar los gastos al máximo y trabajar más. No hay otra opción, Hay que renovarse o morir. Esto más que una crisis es un cambio de ciclo. No podemos esperar a que esto mejore, sino intentar adaptarnos ", asevera el director del hotel AC Palacio de Santa Ana, que también nos desgrana en qué consiste el servicio Santa Ana Feria, otro establecimiento que gestionan, desde Septiembre de 2011, y que atiende la restauración de la Feria de Valladolid y eventos particulares como Bodas, Comuniones y Bautizos.
"Entendimos que había que diversificar y ampliar el negocio. Tenemos un restaurante en un espacio renovado en el que ofertamos bodas a un precio muy competitivo. También ofrecemos nuestro servicio a las diferentes ferias y eventos que en ella se celebran", explica Luis Martínez-Iñiguez antes de desprender los motivos por los que apoyan al deporte vallisoletano.
Actualmente apoyan al VRAC Quesos Entrepinares y al Real Valladolid pero también han ayudado al Club Baloncesto Blancos de Rueda Valladolid. El motivo es simple y esclarecedor. "Creemos que el deporte genera una gran actividad económica en la ciudad, ya que ayuda a que nos visite mucha gente de otras ciudades. Es muy importante apoyarlo por el bien de todos", arguye Martínez-Iñiguez, quien considera que el rugby, como su hotel, es algo emblemático en Valladolid, la capital nacional de este deporte.
De momento, no ha podido comprobar sus bondades "in situ", es decir, en los campos vallisoletanos de Pepe Rojo, pero adquiere, sin dudar, el compromiso de que pronto se dejará caer por el feudo vallisoletano. Tiene ganas, pues varios de sus empleados son asiduos seguidores y le trasladan las embriagadoras singularidades del oval que, de mano del VRAC, le recibirá con los brazos abiertos. No cabe duda…