Segunda edición del torneo Memorial Luis Gallardo de rugby veterano. En esta ocasión se colaboró con la AEDM, Asociación Española de Mastocitosis; con la que se colaboró desde todos los estamentos del club. Muchas gracias a todos por vuestra generosidad.
Se disputó la jornada en los campos de Pepe Rojo, con unas gradas concurridas y buen tiempo. Participaron los equipos vallisoletanos de Arroyo, Minotauro, El Salvador y VRAC Quesos Entrepinares; disputándose el torneo bajo el formato de semifinales, final de consolación y final.
El VRAC debutó en la semifinal frente al Minotauro. Comienzo fulgurante de ambos equipos, en un partido de ritmo alto. Se adelantó a los pocos minutos del comienzo el Quesos con una buena jugada a la mano. Sin embargo, una cadena de indisciplinas defensivas que derivaron en numerosos golpes de castigo permitió a los rojinegros igualar el encuentro con un ensayo de similar factura al quesero. El partido entró en un toma y daca, con abiertas disputadas, defendiendo bien ambos conjuntos. Poco a poco el Quesos fue metiendo más ritmo al juego, sacando los rucks más rápido y recolocando mejor, tanto en defensa como en ataque. Controlando ya mejor a la potente delantera del Minotauro y evitando infracciones, fue haciéndose con el partido; y en un par de ocasiones rozó el ensayo, evitándolo sendos placajes casi sobre línea de marca. Un poco antes del ecuador del choque se desniveló la balanza; y a partir de ese momento ya fueron cayendo los ensayos azules-hasta llegar a cuatro-, que sentenciaron el partido a falta de diez minutos. En los últimos instantes el Minotauro consiguió dos marcas, que llevó el resultado hasta el 20-15 final. Gran partido de ambos equipos.
En la final tocó El Salvador, que previamente había vencido al Arroyo. Como no podía ser de otra manera, el partido fue muy competido y bastante duro. Los blanquinegros tenían más balón y ganaban sus puntos de encuentro sin dificultad, pero a partir de ahí se estrellaban una y otra vez con la buena defensa quesera, siempre organizada y con buenas coberturas, defendiendo igual de bien los rucks perdidos con postes rápidos y sin involucrar a más defensores de los necesarios-siempre las abiertas de El Salvador, pues cada equipo ganaba las suyas-, como las salidas de melé y el buen juego desplegado de los chamizos. Esa organizada defensa permitió al VRAC mantenerse en el partido a pesar de jugarse buena parte de él en su campo, sobre todo en los primeros minutos del choque. La presión defensiva, y más con el paso del tiempo, provocaba errores al equipo rival, y en uno de ellos se originó una contra que posibilitó el primer ensayo azul.
El partido se trabó y se jugó en la zona central del campo. Las pocas aproximaciones rivales fueron bien resueltas por los queseros, haciendo gala de un excelente juego con el pie que alejaba la presión chamiza en los momentos complicados. Pasados los veinte minutos otra rápida transición originó la segunda y definitiva marca del VRAC. A partir de ahí, el partido se endureció, y la organizada defensa impidió la reacción de El Salvador; concluyendo el choque con el resultado de 10-0. El Quesos demostró ser un grupo sólido y un equipo solidario y consolidado. Un equipo donde sus componentes se conocen bien, y donde cada jugador sabe el trabajo que debe hacer.
De esta manera, el VRAC se adjudicó un torneo que demostró que el rugby vallisoletano goza de una excelente salud; y donde todos se volcaron tanto en el homenaje a Luis Gallardo como en la ayuda a la AEDM. Gracias y enhorabuena a todos los que participaron en el evento de una u otra manera.
Al concluir los partidos, se celebró el consabido tercer tiempo, y después los componentes de los cuatro equipos participaron de una cena conjunta.