Antes de la gran batalla (en sentido figurado), un tributo especial. El gran Fernando de la Calle, emblemático jugador del VRAC que dejó la élite a final de la pasada temporada, será agasajado y homenajeado por su público media hora antes del duelo, lo que imprime, más si cabe, un grado más de motivación en el plantel quesero, asolado por las bajas.

No puede contar con los lesionados Francisco Blanco, Álvaro Abril, Nacho Gutiérrez Muller, Carlos Gavidi, Christian Utiel, mas Adam Newton y Sergio Fernández "Mini", quienes se encuentran concentrados con la selección de rugby a siete.

Caterva de ausencias que no inflige temor en el técnico del VRAC Quesos Entrepinares, cuya confianza en sus jugadores disponibles es máxima así como en los juveniles que pudieran entrar en la convocatoria de un equipo que quiere vencer una vez más a su eterno rival y brindar a su público el mejor espectáculo posible.

"Los derbis son partidos muy vibrantes, no muy vistosos desde el punto de vista táctico pero en los que se gana por la motivación y minimizando los errores. El homenaje a Calle, el jugador más importante de la historia de este club. Un deportista ejemplar, dentro y fuera de los terrenos de juego, nos debe motivar aún más", declaró.

Un conjunto, el VRAC, que llega a este encuentro como líder, con un partido menos y una ventaja de cinco puntos sobre el segundo, precisamente El Salvador, histórico rival que juega como visitante el domingo. "Hay una liga particular entre los equipos de Valladolid. Igual somos favoritos por las temporadas pasadas y por las situación actual en la tabla. En un derbi no importa. El Salvador va a plantear un partido duro, muy organizado. Cuantos menos errores cometamos, más oportunidades tendremos de ganar. Las bajas no condicionarán el estilo de juego. Confío en la gente que está. También en los juveniles que vienen entrenando con nosotros", explicó.

Nociones previas. Análisis antes de un duelo que espera congregue a una nutrida representación en las gradas y que, como en tantas otras ocasiones, posea dosis de emoción, esfuerzo titánico y ganas por agradar, engatusar al respetable y, de este modo, captar para la noble causa ovalada a los aficionados que respiren el embriagador ambiente de Pepe Rojo por vez primera.