Una sensacional jugada en el primer minuto de juego acabó en ensayo cuando muchos espectadores aún no se habían sentado. El quince quesero, que hoy vestía de blanco, hilvanó una serie de pases tras recibir una patada Teo Marcos, combinar a Carlos Pastor quien cedió por el cerrado a Pedro Añíbarro que, tras marcharse de su par, cedió inteligentemente al interior a Pablo Gómez que traspasó la línea de marca para anotar muy fácilmente. Fue un espejismo.
El sensacional inicio ocultó los vicios que se desarrollarían a continuación. Parecía que tras cada puntuación quesera, en la siguiente jugada se facilitaba al rival la obtención de puntos en forma de ensayo. Tras el 0-7, vino el 5-7 por un desajuste defensivo tras un saque de lateral. Y tras el 5-10 por puntapié de Teo Marcos llegó el 12-10, de nuevo por ensayo colegial, obra de Juan Sánchez. Incluso un 17-10 que fue maquillado antes del descanso por sendos puntapiés de castigo obra de Teo y que dejaban el resultado provisional en un alentador 17-16.
La primera parte se había salvado a pesar de los tres ensayos recibidos, de los fallos en el placaje, y sobre todo de los diecisiete golpes de castigo cometidos. Si un equipo comete un golpe cada dos minutos y medio es prácticamente imposible alzarse con la victoria. Y a pesar de ello, el VRAC mantuvo la cara. Solo faltaba corregir los placajes y ser más pacientes para no cometer tantas indisciplinas.
Pero la segunda parte no empezó bien porque los golpes de castigo que señalaba la colegiada Jenny Lee seguían llegando y casi siempre se inclinaba el brazo a favor de los Complutenses. Los madrileños, con mucho oficio y jugando a la mano desde cualquier parte del campo, dominaban la melé cerrada y eso dificultaba la remontada. Las sucesivas lesiones de Durango y Gautier obligaban a reajustar una mermada primera línea.
Los mismos problemas del inicio se acentuaron en la fase final del partido. Los delanteros que dirigía Gonzalo Domínguez no eran capaces de jugar sin cometer golpes y los ensayos de Cisneros fueron sucediéndose. Otras tres veces traspasaron la línea de marca del VRAC. El parcial de la segunda mitad concluyo con un esclarecedor 19-3 debido, otra vez más, a los fallos defensivos en placaje, pero sobre todo a los casi veinte golpes que desquiciaron definitivamente a los Queseros. Los jóvenes jugadores deberán corregir las indisciplinas y saber adaptarse a los arbitrajes duros y complicados.
El filial del Cisneros infringe la primera derrota de la temporada al VRAC, que no empaña el gran inicio de temporada, y continuará como líder de la competición. El próximo partido para los pucelanos será en Pepe Rojo frente a Belenos.
36 – COMPLUTENSE CISNEROS SUB-23: Juan Guillermo, Juan Sánchez, Martino Quiroga, Iván Álvarez, José María Cagigal, José María Escario, Ignacio Martín, Ander Iturrioz, Alejandro Leizaola, Santiago Slullitel, Alejandro García, Mateo Bravo, Carlos Blanco, Mario Vallejo y Héctor Medina.
También jugaron: Miguel De Pablo, Giraldo Matheu, Sergio Malagón, Jorge Gómez, Antoine Demoisy, Beñat Salaberri, Sergio Marchán y Salvador Guardiola.
Ensayos de Martino Quiroga, Juan Sánchez, Alejandro Leizaola y Antonio Demoisy (3). Transformaciones de Mario Vallejo (3)
19 – VRAC QUESOS ENTREPINARES SUB-23: Diego Calderón, Pablo Gautier, Daniel Durango, Marino González, Manuel Pérez, Juan Laiz, Rubén Peña, Álvaro Meléndez, Gonzalo Domínguez, Teodoro Marcos, Pedro Añíbarro, Pablo Gómez, Luis Sanz, Mario Blanco y Carlos Pastor.
También jugaron: Álvaro Rodríguez, Andrés Espinosa, Manuel Sevillano, Juan Ramos, Jacobo Pérez, Julien Marciel y Adrián Pinedo.
Ensayo de Pablo Gómez. Una transformación y cuatro puntapiés de castigo de Teodoro Marcos