Por M.A. Torres

   Me cita en un lugar emblemático para el club: el antiguo pub de la Plaza de Tenerías que sirvió como lugar de celebración de los terceros tiempos del VRAC hace ya algunas temporadas. Franqueo la puerta un tanto nervioso (no todos los días se entrevista a un experto periodista) y allí le encuentro, agitando un café con una amplia sonrisa que le atraviesa la cara de oreja a oreja. Tras los protocolarios saludos iniciales, nos sentamos en una mesa cercana y parapetado tras un gin-tonic, comienzo una agradable charla con Antonio Aragón, nuestro jefe de prensa.

   Vallisoletano, licenciado en periodismo, viajero incansable y siempre preocupado por descubrir el lado oculto de los rincones que visita, Antonio comparte sus labores en nuestro club con el trabajo en la agencia EFE y su habitual colaboración en un medio de prensa digital donde escribe sobre el Real Valladolid.

   Me cuenta que hace tres años y medio inició sus primeros pasos en el VRAC con un Derby; casualmente también finalizará su andadura con otro Derby. Guillermo Abril le recomendó a la directiva y tras charlar con Chema Valentín-Gamazo y el entonces vicepresidente Toño Garrote, se involucró en este mundillo del balón oval en el que tenía una cierta experiencia al ser autor de las crónicas de rugby para EFE. Por entonces acababa de llegar de Sudáfrica, donde había pasado 34 días siguiendo a la selección española de futbol en el mundial 2010. Inquieto como pocos, se propuso como meta ganar un premio que otorgaba la multinacional ERICSSON para escribir un blog relatando la trastienda de un mundial de futbol. Ganó el premio y a pesar de que inicialmente solo podía estar tres días en Sudáfrica y ver un solo partido, se las ingenió y logró estar presente en todos los partidos que España disputó en el Campeonato del Mundo. Viajó por toda esa gran nación y recorrió lugares que nunca frecuentaban los turistas.

   Me relata emocionado la extraña sensación que tiene de ser talismán para los equipos y jugadores que le rodean. El día de la final del mundial, habló con Iker Casillas en la concentración previa y le comentó: "Iker, hoy el campo está para ti". Y esa noche el cancerbero español se consagró como el mejor guardameta del mundo con dos paradas antológicas. En otra ocasión repitió esa misma frase ante Peña, jugador del Real Valladolid, y esa tarde anotó su primer gol como futbolista profesional. Cree que esa buena suerte se la ha transmitido al VRAC, porque llegó tras obtener la Copa del Rey de 2010 y se marcha ahora tras el campeonato de liga de 2013, en lo que califica como la mejor época de la historia del "Quesos".

   Afirma que deja un club con una solidez en todos los aspectos: deportivo, social, económico, institucional y de cantera. No le sorprende que año tras año los jóvenes valores del club consigan varios campeonatos o subcampeonatos y que el número de jugadores de las categorías inferiores haya experimentado un crecimiento exponencial.

   Interrogado sobre el mejor jugador de rugby que ha visto desde la tribuna de prensa de Pepe Rojo, lo tiene muy claro: Se manifiesta seguidor incondicional de Adam Newton por quien tiene una debilidad especial. Reconoce que el mejor jugador que ha pisado (y probablemente pisará) los campos de la liga española es Dan Waenga, "parecía jugar andando y realmente era un contundente apertura en ataque y defensa". Esta temporada admira el juego de Perico Martín que ha sido capaz de levantarle del asiento en algunas de sus actuaciones.

   ¿Lo mejor de estos tres años? Sin duda, la alegría de jugadores y afición tras la consecución de los dos títulos ligueros. Una explosión de júbilo general que tuvo el placer de contemplar y redactar. Recuerda con especial cariño el guiño que le hizo un jugador en medio de las celebraciones. Acunando la copa de la liga entre sus brazos, le señalo primero el trofeo y luego le apuntó con su dedo como afirmando: "Antonio, esto también es fruto de tu trabajo". Por supuesto no puede olvidar todas las personas que ha conocido dentro del club, amigos procedentes de tres continentes distintos y que le han aportado "algo especial".

   Instado a recordar los peores momentos, cree que no ha habido tales y que los problemas los ha llevado con mucha paciencia y una dosis de simpatía. Si acaso, como momento más tenso, el rifi-rafe que ocurrió la temporada pasada en la rueda de prensa posterior a la semifinal de liga frente a El Salvador. Tras la victoria "in extremis" de los jugadores de "Liso Arbizu", este sacó las uñas de "Puma Argentino" ante una pregunta que consideró inadecuada del compañero de la cadena SER, José Luis Rojí. La posterior polémica en los micrófonos se diluyó con una entrevista en dicha radio, donde Lisandro firmó la paz con sus entrevistadores.

   Se declara fiel admirador del estilo de Diego Merino, actual entrenador del VRAC y antiguo compañero de pupitres en el colegio. Le considera un estudioso del rugby, un míster meticuloso y sereno que tiene un discurso muy comedido en los medios. Su "partido a partido" es un lema muy inteligente y práctico.

   Antonio se marcha ahora para iniciar una nueva singladura. Maravillado por las gentes y el paisaje Sudafricano, ha conseguido una interesante oferta de trabajo en Ciudad del Cabo, la urbe más cosmopolita del país de los Springbooks. Allí desarrollará tareas de "marketing on-line" para una empresa de casinos y juego por internet. Algo muy distinto a lo que venía haciendo hasta ahora, pero está convencido que va a vivir una experiencia inolvidable.

   Le propongo convertirse en ojeador oficial del VRAC para conseguir talentos rugbísticos que quieran conocer algo del rugby patrio y se entusiasma con la idea. Acordamos que actuará como embajador de nuestro club y por supuesto estará en contacto con nosotros a través del correo electrónico para intercambiar noticias. Incluso barajamos la posibilidad de una colaboración periódica en nuestra web para que nos relate "las andanzas de un quesero en las tierras de Mandela".

   Se manifiesta entusiasmado con la idea de poder vivir como periodista el ocaso final de un ser único, mítico y excepcional como es Nelson Mandela. Impresionado por el museo dedicado en su honor, no dudará en visitar la prisión de la Isla Robben. Antes de partir, quiere leer el libro de John Carlin "el factor humano" en el que se explica la idea de "Madiba Mandela" para unir todo un país fracturado a través del campeonato del mundo de Rugby. Por supuesto, ansía ver en directo un Sudáfrica-Nueva Zelanda en el mítico Ellis Park de Johannesburgo.

   Hora y media después, tengo la sensación de haber conocido mucho mejor a un tipo sencillo, agradable, inquieto y servicial como Antonio. Aún responde a varias llamadas relacionadas con la organización del Derby y el homenaje a Calle. Si el visado se lo permite, volará a tierras australes la primera semana de Diciembre.

   Nos despedimos en las escaleras que están junto al pub. Aquellas en las que Mike Davis y Glen Rolls entonaron ante sus compañeros la danza guerrera del "Haka" tras conseguir la Copa del Rey del 2010. Casualidad o intención, Antonio me ha hecho recordar al pie de esas escaleras sus tres maravillosos años dentro de la familia quesera.

Hasta siempre, Antonio.