"¿Qué más puedo pedir?. No me lo esperaba y cuando nos dijeron que entrábamos en la convocatoria me quedé en shock. Fueron los seis mejores minutos desde que empecé a jugar a esto", declara Jesús Pérez, alias "Jesusón", segunda línea de 20 años que empezó a practicar el rugby hace cuatro años.
Por aquel entonces jugaba al baloncesto, pero la insistencia de un amigo le llevó a probar un deporte, el ovalado, que "enseguida" le dejó "enamorado", asevera. Ahora, siente que el esfuerzo y el "sacrificio" en pos del progreso propio "tiene su recompensa". "Te incita a no relajarte y seguir trabajando para poder ser algún día titilar. Con esta confianza nos creemos que somos el futuro del equipo", apostilla el segunda línea, que se analiza como un jugador "trabajador y serio" que considera que debe mejorar la "visión de juego y la continuidad".
Ganas no le faltan después de un debut genial, con victoria y bonus. Idénticas a las de su compañero, Jaime Barriuso, tercera línea de 19 años, que contactó hace cinco con el oval gracias a su hermano y que también acogió la llamada a filas con "bastante sorpresa". "No me lo esperaba. La competencia es muy grande en el primer equipo. Se agradecen bastante estos minutos, en los que me puse nervioso. No quería defraudar", comenta Barriuso.
Nervios que se fue sacudiendo con la acogida brindada por sus compañeros, gente "muy maja" que estuvo pendiente tanto de él como de Jesusón para que su debut fuese lo más plácido posible pese a la adaptación "a un ritmo de juego" y a un físico "mucho más grande". Aspecto, este último, en el que es consciente debe "mejorar", pues estriba que es uno de sus puntos débiles, el cual trata de suplir con su predisposición "a dejar todo" lo que tiene sobre el campo.
Por último, quiso dejar claro que habla en nombre de todo el equipo juvenil cuando asegura que con Diego Merino al frente "se ve más fácil" llegar a División de Honor, lo que "anima más" a los juveniles del equipo sub 21. "Un honor", matiza que tanto él como Jesusón han probado y quieren seguir degustando. Cuanto más… mejor.